LA MALETA

 De cualquier forma cargamos nuestra Maleta, cerramos la puerta y a prestar libros nos fuimos. Partimos al  centro del pueblo y nos dirijimos a nuestros potenciales usuarios. A todas aquellas personas que trabajan en el comercio. Ellos al igual que nosotros están todo el día entre cuatro paredes y no les queda tiempo para venir a la Biblioteca.

Les contábamos en que consistía nuestra visita y una vez entendidas ambas parte pasábamos al "empreste" (como se dice en el campo). Sacábamos el notebook, pistola y vamos prestando. Incluso hasta los clientes que había en este Local de "Comida al paso" se entusiasmaron pero para nosotros no bastaba solo el entusiasmo ya que junto a eso también tenían que cumplir el mínimo de requisitos y eso era ser habitante de nuestra Comuna.

Aquí nos paso algo muy simpático. Estábamos en una Veterinaria mostrando los libros y cuando la nueva usuaria se decidió le dije a mi compañera que sacara del bolso la "pistola" pero se lo dije así.."Mari pásame la pistola" y la niña me quedo mirando y sonrío disimuladamente y le pregunte porque se reía y me dijo, "lo que pasa es que a mi colega le dicen "pistola". jajajajaaa...

Conclusiones: Una experiencia MARAVILLOSA, NOS ENCANTO. A todos les gusto lo del préstamo Móvil, quedamos muy comprometidos pero ¿Nos fallo la Maleta!. El no contar con divisiones en el interior permitió que los libros se amontonaran abajo lo que recargó el peso y formo una pequeña “guata” que a su vez empezó a topar el suelo. Lo otro las ruedas demasiado pequeñas y frágiles.